Los sistemas de extincion de incendios mediante gases son sistemas fijos de extinción que se instalan en lugares en los que no se puede utilizar polvo o agua. Se trata de sistemas de extinción limpios, que no provocan daños materiales ni eléctricos y que fundamentalmente funcionan de dos maneras, absorbiendo el calor y reduciendo o eliminando el oxígeno para así eliminar la combustión.
Los sistemas de extinción mediante gases tienen un funcionamiento similar a los tradicionales rociadores de agua o agua pulverizada. Cuando se dispara la alarma de incendios los rociadores expulsan el gas que haya en la instalación y que normalmente se almacena en envases a presión. Es muy importante que se produzca una evacuación previa de todas las personas, ya que algunos de estos gases pueden ser peligrosos al reducir el nivel de oxígeno prácticamente a cero.
Pero ¿qué gases utilizan?
👉 Anhídrido carbónico CO2, que reducen la cantidad de oxígeno hasta que el fuego se extingue. Son peligrosos para las personas y necesitan concentraciones elevadas.
👉 Gases inertes: desplazan el oxígeno hasta que en la zona no hay valor suficiente para permitir la combustión. Indicados en zonas eléctricas y producen una extinción limpia, sin residuos.
👉 Gases fluorados: se emplean directamente contra el fuego y actúan por enfriamiento de la llama, necesitando concentraciones relativamente bajas. Indicados para riesgos eléctricos donde no es posible la limpieza de los bienes y poseen una baja toxicidad para las personas.
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